Tras referir las demoras y
complicaciones registradas en la construcción de los estadios en que se
disputará el Mundial de Fútbol 2014, el suplemento deportivo de La Nación alude a la preocupación que
genera la situación en las terminales aéreas de Brasil, que probablemente
reciba a un millón de visitantes extranjeros para esa competencia. “Ni los
aeropuertos ni los sistemas de transportes de las ciudades sede están aún
preparados; las quejas por las demoras en los embarques de vuelos y las
precarias condiciones de las terminales aéreas son cotidianas, así como los
embotellamientos y la falta de redes de transporte público eficientes en las
urbes más grandes”, dice el diario, que consigna luego las preocupaciones
expresadas a la prensa por el titular de la FIFA, Joseph Blatter: “¿Cómo será
el recibimiento a estas personas en los aeropuertos? ¿Cuánto tiempo tardarán en
ser liberadas para salir de estas terminales? Son temas muy importantes y que
también afectan a las selecciones”, resaltó a la prensa el presidente de la
FIFA, Joseph Blatter.
La
Nación
recuerda que, a principios de año, el gobierno de Dilma Rousseff entregó en
concesión los aeropuertos de Brasilia, San Pablo, Campinas y Natas, mientras
las licitaciones para los de Río de Janeiro y Belo Horizonte se realizarán en
octubre.
Según un especialista de la
Universidad Federal de Río de Janeiro, se está encarando “a las apuradas” lo
relativo al traslado hacia los estadios, pero no lo que hace al transporte en
las ciudades, con lo cual “el legado de movilidad urbana que quedará será
inservible”. Preocupan también las demoras en materia de telecomunicaciones. “El
gobierno se apresuró a instalar en las seis ciudades sede de la Copa de
Confederaciones la cobertura de telefonía celular e Internet 4G, pero el servicio
que brindan por ahora las operadoras es deficiente. Y ni siquiera la cobertura
3G es buena y confiable en el resto del país”, dice el diario al respecto.
Fuente: La
Nación / Deportivo, de 12/6/13.