martes, 26 de marzo de 2013

Avianca-Taca, en plena expansión, llevará el nombre de la colombiana

A fines de mayo, el círculo se cerrará para la fusión Avianca-Taca, consumada hace tres años. La marca Taca, de origen centroamericano, dejará de existir y toda la aerolínea usará el nombre Avianca. La decisión no figuraba en los planes iniciales, pero investigaciones de mercado mostraron su conveniencia. “Avianca es la marca aérea más antigua de América Latina, y la segunda en el mundo después de KLM”, dice Fabio Villegas, CEO de la compañía y ex ministro de Gobierno de Colombia.
Con mejoras en el interior de los aviones, en el entretenimiento, en el nuevo sitio web y los call centers integrados, la empresa apunta a que el cambio sea percibido por los clientes “como una superación de los standards operacionales” y no como una mera modificación del logotipo.
El adiós al nombre Taca se produce en un marco de expansión. Avianca-Taca tuvo 23 millones de pasajeros el año pasado, 27% más que la suma de los movilizados por las dos compañías al fusionarse en 2010. “El año pasado facturamos 4.000 millones de dólares, con un crecimiento de 11%”, dice Villegas. Articulada sobre cuatro hubs —que funcionan en Lima, Bogotá, San Juan y San Salvador—), la red agregó más destinos, sobre todo en Estados Unidos y Canadá, y se acerca a los 5.000 vuelos semanales.
Avianca pertenece al grupo Synergy, del colombiano-brasileño Germán Efromovich, y tiene 66% de las acciones, mientras Taca es propiedad del grupo Kingsland, de la familia salvadoreña Kriete.
“En los últimos años, ha habido un desarrollo comercial y de flujos de inversión importante dentro de Latinoamérica. Donde tradicionalmente había mercados nacionales segmentados, o a lo sumo dos bloques, uno del norte de Sudamérica más conectado con Estados Unidos, y uno del sur más conectado con Europa, ahora hay un panorama de integración mucho mayor, lo cual facilita el crecimiento”, dice Villegas, quien estima que la empresa crecerá 10% este año.

Fuente: Clarín / iEco, de 24/3/13.