“Hay un drenaje de divisas que se
da a través de operaciones de turismo”, señaló el jefe de Gabinete, Jorge
Capitanich, y agregó: “Tenemos que ser muy cuidadosos en la administración de
las reservas para garantizar el flujo de suministros de bienes intermedios, de
insumos básicos y de insumos de carácter industrial para potenciar el
crecimiento de la actividad económica”. Por su parte, el presidente del BCRA,
Juan Carlos Fábrega, apuntó que saldo negativo en el rubro turístico —que
provocó una fuga de “10 mil millones de dólares” el último año— es uno de los
factores que han provocado esa caída.
Para el Gobierno, la herramienta
no implica un desdoblamiento del mercado cambiario, ya que son pagos a cuenta
de Ganancias y Bienes Personales y quienes no pagan esos tributos pueden
reclamar el reintegro del dinero. La decisión había sido desestimada en los
últimos meses, pero se transformó en realidad con el cambio de gabinete. Según
señaló Página 12, no tiene un
objetivo recaudatorio ni representa por sí sola una solución a las tensiones en
el mercado cambiario. “Lo que busca es desincentivar la fuga de dólares. El
diagnóstico del nuevo equipo económico es el siguiente: la creciente salida de
moneda extranjera por motivo de turismo no sólo refleja una mejora de poder
adquisitivo de los sectores de mayores ingresos, sino la profusión de vías de
compra de divisas para atesoramiento por parte de quienes especulan con una
fuerte devaluación”, explicó el diario.
Según el consultor Ricardo
Delgado, director de Analytica, las reservas no caen por los pagos de deuda
pública sino por las crecientes ventas de dólares del BCRA al sector privado para
distintos usos. A su juicio, el turismo no es el principal “culpable”. En 2012,
refiere, el sector privado ingresaba divisas por 7.300 millones de dólares a
septiembre y este año fuga 2.700 millones. De esa diferencia, sólo 30%
corresponde a la cuenta “viajes y turismo”, mientras que el resto obedece a un
menor saldo comercial liquidado. Entretanto, Pablo Wende dice en Ámbito Financiero que el balance
cambiario del tercer trimestre es contundente en relación con “el déficit que
está generando el turismo, que se ha transformado en una gran autopista para la
salida de divisas”. Entre julio y septiembre, apunta, se fueron 1.800 millones
de dólares y en el acumulado del año la cifra llega a 6.152 millones, contra
5.584 millones de todo 2012. A esa cifra, hay que agregar los gastos con
tarjetas de crédito en el exterior por compras o las operaciones con sitios
online.
Entre las agencias de viaje,
había dudas sobre el impacto que tendrá la medida en la demanda. “Si bien hubo
gente que en las últimas semanas adelantó la compra de pasajes aéreos, la
realidad es que al día de hoy la venta fuerte de la temporada de verano aún no
se concretó, y comparado con el año pasado estamos apenas un 10% por encima. De
acá en más es muy difícil saber qué va a pasar”, dijo Fabricio Di Giambattista,
titular de la Asociación Argentina de Agencias de Viajes y Turismo (AAAVYT). A
su vez, Tomás Ryan, ex presidente de la entidad y dueño de una firma mayorista,
señaló: “La medida armó un lío bárbaro entre las agencias, porque hay mucha gente
que tenía el paquete señado, pero ahora tendrá que pagar un 15% más. Lo mismo
sucede en la relación entre las agencias de turismo y los operadores
mayoristas, con operaciones que ya estaban acordadas de palabra, pero que no se
habían terminado de completar”.
Fuentes oficiales confirmaron que
los paquetes o pasajes adquiridos en cuotas antes de los cambios se pagarán con
la percepción anterior del 20% hasta que termine de cancelarse el gasto.
Fuentes: Ámbito
Financiero, BAE, Clarín, Diario Popular, El Cronista, La Nación, La Prensa,
Página 12 y Tiempo Argentino, de 4/12/13; Página 12, de 5/12/13, y BAE, El
Cronista y Veintitrés, de 6/12/13.