“La aviación de la región ha dado un salto enorme en los últimos 10 años. Hoy las aerolíneas en América latina están operando flotas con edades menores que la media de lo que se opera en el resto del mundo, cuando hace algunos años teníamos la impresión de que la región sólo utilizaba aviones más antiguos. Ahora tienen los aviones más eficientes y más amigables y respetuosos con el medio ambiente, y de eso tienen que sentirse muy orgullosos porque han hecho en 10 años lo que a otras regiones les llevó 25”, dijo durante entrevista telefónica con La Nación desde su sede laboral, en Toulouse.
Según la última Proyección Global de Mercado (GMF por sus siglas en inglés) de Airbus, las líneas aéreas de América latina requerirán 2120 aviones nuevos hasta 2031, proyección que incluye 1660 aviones de pasillo único, 420 aviones de doble pasillo y 40 aviones de gran tamaño, con un valor estimado en 242 .000 millones de dólares.
Los indicadores socioeconómicos proyectan que la clase media latinoamericana se duplicará en los próximos veinte años. Además, 10 de las 92 megaciudades con más de 10.000 pasajeros diarios de largo recorrido estarán ubicadas en América latina. Ese alto crecimiento se refleja de modo directo en la mayor demanda de aeronaves que se proyecta para la región.
González Rodríguez agrega que, si bien es cierto que el mercado de carga está pasando por uno de los peores momentos que jamás haya visto, hay aerolíneas, como Tampa, subdisidiaria de Avianca-TACA, “que acaba de recibir su primer A330-200 carguero, un avión completamente nuevo que están operando a un máximo rendimiento. Creo que no será el último caso de aerolíneas cargueras de América latina revisando sus previsiones de mercado y sus flotas”.
Fuente: La Nación / Comercio Exterior, de 2/4/13.
